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Rooibos Limoncello. Infusión de rooibos sudafricano aromatizada con cáscara de limón, cáscara de naranja, granadina, lemon grass, pimienta rosa, canela, cardamomo y aroma natural de limón. Su sabor cítrico ligeramente ácido, con el toque especiado, lo hace tan interesante como refrescante. Mucho más divertido que un sencillo rooibos con zumo de limón.
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Infusión de rooibos sudafricano aromatizada con trocitos de chocolate, cáscara de naranja y flores de azahar. Un clásico básico, de los más vendidos entre los aficionados a las infusiones sin teína. De sabor dulce y agradable, es una variedad perfecta para iniciarse en el mundo de las infusiones y la pueden tomar personas de todas las edades, embarazadas. Apta para veganos.
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Infusión de rooibos sudafricano pura, sin aromatizantes, procedente de agricultura ecológica. Respetuosa con el medioambiente y sin cafeína.
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Miel de Bosque Nacional, cruda, sin añadidos, procedente de la Comunidad de Madrid. Mielato de abeja 100% natural, sin aditivos, de comunidad vegetal. Elaborada en los macizos montañosos, a partir de secreciones azucaradas de árboles y de ciertos animales que se alimentan de la savia de las plantas. De sabor menos dulce que otros tipos de miel, con claras notas saladas y con un toque malteado, como a cereal tostado. De color ámbar oscuro y de cristalización lenta. Este tipo de miel es la más balsámica de todas, en cuanto alivio de resfriados se refiere. Su sabor nada empalagoso, es perfecto para su consumo con yogures y lácteos.
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Miel de abeja 100% natural, sin aditivos. Elaborada a partir de néctar de flores de espliego (monofloral). De sabor dulce y suave, con notas ácidas, de marcado aroma floral, a lavanda, de color ámbar claro o blanco. La zona de producción de este tipo de miel nacional, se encuentra en La Alcarria (Guadalajara). Muy relajante y de efecto antitusivo.
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Tradicional planta aromática para la elaboración de una infusión suave, relajante y digestiva. Refrescante, con toques mentolados.
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Infusión de rooibos sudafricano aromatizada con canela, pimienta negra, jengibre, cardamomo, clavo y cáscara de naranja. Especiado y aromático. Dísfruta de la mezcla de especias más conocida de Asia, sin gota de cafeína. Reposo: 5 minutos.
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También llamada hierba de los gatos, crece en los bosques, los márgenes de los ríos y herbazales húmedos. Se cree que deriva del latín valere, que significa estar bien o estar feliz. Se utiliza su raíz, recogida en otoño y secada en oscuridad. Su olor es desagradable y su sabor fuerte. Su infusión tiene propiedades calmantes y relajantes, ayudando a conciliar el sueño en estados de excitación nerviosa. Reposo: 5-6 minutos.
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Infusión de rooibos con vainilla de Madagascar, tipo Bourbon. De sabor delicado e intenso aroma de carácter tostado, típico de este tipo de vainilla, que es la más valorada en el mundillo de las infusiones y de la coctelería. Perfecta para tomar a cualquier hora del día. La vainilla, además, como cualquier afrodisíaco, produce sensación de bienestar.
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Hojas y flores enteras del árbol del tilo. De efecto calmante y sedante suave.
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También llamada limoncillo y cimarrón, es originaria de Chile, donde crece en lugares secos y montañosos, a menudo pedregosos y en climas templados. Se distingue bien por su característico olor a limón y alcanfor. Sus frutos son comestibles y sus hojas se utilizan como especia de cocina en la gastronomía chilena. Utilizada desde el periodo precolombino por sus propiedades medicinales (como curiosidad, llegó a utilizarse como sustituto de la quinina para el tratamiento de la malaria). Su infusión tiene propiedades diuréticas, hepatoprotectoras, antiinflamatorias, antioxidantes, sedantes y calmantes. Reposo: 5-6 minutos.
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Tradicional infusión suave, relajante y digestiva; mezcla de dos hierbas aromáticas del género mentha: el poleo y la menta sativa. Para amantes de la menta.
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Conocido popularmente como anís matalahuva, matalahúga y pimpinella blanca, es una hierba originaria del Asia sudoccidental y la cuenca mediterránea oriental. Sus semillas se utilizan como condimento en panadería, dulcería y repostería; en la elaboración de licores, aguardientes y algunos platos de curry y mariscos. Es muy interesante su uso en platos de legumbres, por su gran capacidad para eliminar los gases acumulados por las comidas. La preparación de infusiones a base de anís por sus propiedades medicinales, es una costumbre popular muy arraigada en nuestra cultura mediterránea.